domingo, 10 de agosto de 2014

Afino sobre solera - I

Consiste en descarburar la fundición partiendo de chatarra de hierro y acero y mineral de hierro. Se utilizan los hornos Martin-Sicmcns (fig. 13), que se llaman así por deberse a estos dos metalúrgicos.
La teoría se debe al francés Martin, quien, ante la imposibilidad de lograr con los hornos entonces en uso, temperaturas suficientemente elevadas para producir la fusión, propuso la obtención de acero fundido en un horno junto con la fundición y algunos cuerpos oxidantes, entre ellos mineral de hierro carente de carbono o bien chatarra de hierro. Pero ciertas reacciones impidieron su aplicación, hasta que en 1870 el alemán Siemens, inventor de un horno de gasógeno que recuperaba el calor arrastrado por los gases, consiguió producir industrialmente el acero. De estas dos invenciones: el procedimiento Martin y el horno Siemens, que se completaban, nació el sistema Martin-Siemens. 
El horno comprende un gasógeno y produce gas pobre y baterías de recuperadores del calor. El gas, muy combustible, pasa por uno de éstos antes de entrar en el horno, al mismo tiempo que el aire necesario para la combustión pasa por otro recuperador.
Así, los gases y el aire llegan al horno muy calientes y, gracias a la elevada temperatura del interior, al mezclarse, producen la combustión completa, siendo después evacuados los gases por los otros dos recuperadores. Los recuperadores son galerías llenas de columnas de ladrillos refractarios que, por entretener los gases que salen del horno, se calientan a sus expensas, almacenando gran cantidad de calor, que luego devuelven, cuando sirven de paso al gas que viene del gasógeno y al aire exterior necesario; éstos absorben el calor almacenado en las paredes, de modo que, mientras una batería de recuperadores almacena calor, la otra lo cede a los gases del gasógeno, y viceversa.
El horno es de reverbero, o sea aquel en que la fundición a fundir no está en contacto directo con el combustible; únicamente las llamas y los gases de la combustión se ponen en contacto con el metal en la solera del horno. El régimen de los hornos de reverbero es oxidante a consecuencia de la acción prolongada de las llamas sobre el baño del metal y su buena marcha exige que el combustible se queme por completo. Con estos hornos es posible colar piezas de grandes dimensiones de composición especial y de una sola vez.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario